En la mañana
la luz hablaba a gritos,
la sombra muda.
el miedo a reflejarse
sin saber
si es la sombra del cuerpo
la que quema
o es el fuego del alma
que se extingue.
Ya con la oscuridad te haces la pregunta
que no tiene respuesta:
¿Ha sido siempre la sombra tan pesada?
Noche clara del cuerpo.
Que profundidad. Que sentimiento más intenso me ha producido leer este poema.
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