"EL SABER SE DEBE TANTO AL INGENIO COMO AL GUSTO."









martes, 25 de marzo de 2025

ALEJANDRO BAUZÀ BARDELLI - YA NO PIENSAS EN MÍ

 Ha sido esta mañana, mientras escribías: has levantado la mirada de la pantalla y te has dado cuenta de que ya no piensas en mí. No has sabido recordar cuándo dejaste de hacerlo pero lo cierto, mi amor, es que has hecho lo posible por olvidarme.

Afuera llovía. Las gotas se estrellaban como pájaros ciegos contra el vidrio y luego, lentamente, lloraban hasta el alféizar. Siempre decías que te gustaban los días de lluvia, el halo azufre de las nubes, su oscuridad luminosa, la pureza de los colores sobre un escenario gris. Te reconfortaba  sentirte resguardado mientras el mundo se acurruca bajo las cornisas y los charcos reflejan el cielo y los neumáticos sisean sobre el asfalto mojado.

Sobre tu escritorio hay una vieja fotografía mal enmarcada que encierra un fantasma cuya sonrisa ya no reconoces, que te mira con ojos de icono bizantino, con unos ojos que ya no son los míos. Buscaste mi cara adentro, en las circunvoluciones y cisuras de tu cerebro, pero allí no me encontraste más que bajo la forma de un esbozo desdibujado. Entonces dejaste de mirar esa fotografía: te dolía mirarla.

Saliste a la calle, el frío te mordió los pómulos mientras la lluvia repiqueteaba sobre la negra cúpula que te abriga como una furiosa bandada de gorriones. Nada te queda de mi voz, solo el esqueleto marchito de unas palabras casi olvidadas. Las cenizas, te dijiste, las cenizas de un montón de huesos abandonados.

Ya casi no me recuerdas. Me duele, me alegro. Lo prefiero a tu dolor, a ver cómo te consumes, cómo te apagas. Te lo ruego, te lo ordeno: déjame marchar con la lluvia, deslizarme calle abajo hacia el sumidero de tu olvido.

Cae la noche, afuera ya no llueve. El reflejo pálido de las farolas se refleja sobre los adoquines, las avenidas están vacías como una falsa promesa. Tecleas, el ritmo quebrado de las letras naciendo se mezcla con el rumor lejano de un coche surcando el suelo empapado, miras por la ventana y ves enmarcada en una ventana remota a una mujer que plancha cansada. Luego te sumerges de nuevo en los pliegues rosados que se arremolinan en el cofre óseo de tu cráneo y escribes, otra vez, como un submarino a la deriva mientras desde tu escritorio mi fantasma de ojos bizantinos ya no te mira y yo, por fin, me desvanezco.


Àlex Bauzà Bardelli

alexbauza@gmail.com

viernes, 14 de marzo de 2025

DOS EXPOSICIONES EN UN PLIS PLAS

A la vuelta de un viaje, tuve que esperar en Madrid más de tres horas el enlace, lo que me pareció, al principio, un fastidio, pero  se me ocurrió que, si se cumplían los horarios, podría acerca a algún museo. Estuve mirando las exposiciones que había y, para mi sorpresa, en el Prado todavía continuaba la exposición de Polke y Goya a la que, en Navidad, no me dejaron entrar porque llevaba una pequeña maleta. Llamé al museo para asegurarme  de que, esta vez, podría visitar la exposición a pesar de que llevaba maleta. También vi que, en el Thyssen, había empezado una exposición sobre Proust que me pareció atractiva. Calcule los tiempos de desplazamiento - por suerte, los dos museos están muy cerca y cerca de la estación-  y el tiempo que podía dedicar a cada exposición y me acerqué al Paseo del Prado .

Empecé por la de Proust. Me parecía interesante, pero no sabía qué es lo que iban a mostrar, no había tenido tiempo de leer sobre la exposición. La verdad, es que me ha gustado mucho. Los cuadros hacen un recorrido por la vida  del escritor, por su interés por las artes, por la música, especialmente por la pintura,  por su relación de amistad con los pintores más importantes del momento y las referencias que hay en su obra À la recherche du temps perdu y Les plaisirs et les jours, a estos cuadros o a estos artistas o al contrario.Los cuadros también muestran la época de cambios y transformaciones que le tocó vivir al escritor y que han quedado plasmados en los cuadros de los artísticas del momento. Me ha encantado porque está muy bien comisariada y por los cuadros que se exponen. La muestra se termina con dos autorretratos de Rembrandt que son una delicia. También me sorprendió ver un Vermeer que no recuerdo ahora mismo si estaba en la exposición del Rijksmuseum de Ámsterdam, además de cuadros de Van Dyck, Watteau, Turner, Fantin Latour, Manet, Monet, Renoir o Whistler. 

Ahora, lamento  no haber estado diez minutos más porque no la pude saborear con un poco más de tranquilidad por miedo a no tener tiempo de ver la del Prado ya que no sabía que la de Polke, eran tres salas y con cuadros de gran tamaño.

Al llegar a la sala, me encontré con una visita guiada bastante numerosa de alemanes. Casi todos señores  que, por sus trajes, parecían ejecutivos. La guía maravillosa. Yo les tuve que dejar y pasar a las otras salas porque eran bastante altos y no podía ver bien los cuadros. Luego volví, retrocedí a la primera, una vez ellos habían pasado de salas. De esta exposición me encantaron las resinas y sobre todo, Las viejas o El Tiempo (1810-12)  un capricho de Goya perteneciente al Museo de Lille y que se expone por primera vez en España o El coloso.  Llama la atención el interés que despertó en este artista alemán contemporáneo Goya y los estudios que hizo sobre el cuadro de Las viejas. También me gustó mucho esta exposición. 

Nunca imaginé que, después de casi tres meses, podría verla tan desalentada que me fui de la cola de entrada, allá en el mes de diciembre. Realmente ha sido una suerte que todavía estuviera y que tuviera que estar más de tres horas en Madrid para esperar el tren. A veces, cuando menos te lo esperan, las cosas encajan. 

PROUST Y LAS ARTES



El museo presenta una exposición sobre la importancia que el arte tuvo en la obra de uno de los escritores más influyentes del siglo XX, Marcel Proust (Auteuil, 1871 - París, 1922), reconocido tanto en la literatura como en la filosofía y la teoría del arte. Las ideas estéticas que Proust desarrolla en su obra, los ambientes artísticos, monumentales y paisajísticos que le rodearon y que recrea en sus libros, así como los artistas contemporáneos o del pasado que le sirvieron de estímulo son algunos de los aspectos que articulan el recorrido de la muestra. El objetivo es resaltar esa vinculación y la interrelación entre el arte y su figura, su vida y su trabajo. 

Para entender a Proust es importante conocer el París en el que vivió, es decir, la cosmopolita y rica capital de la Tercera República, su gran transformación tras las reformas urbanísticas del barón Hausmann, con la aparición de la electricidad, los coches, los espectáculos, los restaurantes y los cafés. Proust era un fascinado no solo de las artes, sino de esa modernidad tan en auge a fines del siglo XIX. La imagen de lo moderno que crearon los pintores impresionistas a través de su representación de las calles y otros ambientes de París está en la base de la estética proustiana: todo ello marcaría su biografía y también sus escritos.

Una de sus primeras obras publicadas, Los placeres y los días (1896), se presenta en la primera sala de la exposición, mostrando su temprano gusto por las artes, la música, el teatro y, especialmente, la pintura y sus frecuentes visitas al Museo del Louvre. Ese interés continúa en su obra cumbre, la novela A la busca del tiempo perdido, publicada en siete partes entre 1913 y 1927. El París de la Tercera República, sobre todo el entorno de los Campos Elíseos, el Bois de Boulogne y los palacios de la aristocracia del Faubourg Saint-Germain, o las playas y costas del norte de Francia, son algunos de los escenarios en los que se desarrolla la novela y que reflejaron en sus cuadros pintores como Manet, Pissarro, Renoir, Monet, Boudin o Dufy. Por otro lado, la importancia del teatro en la obra de Proust tiene su reflejo en la impresionante pintura de Georges Clairin, procedente del museo del Petit Palais de París, representando a Sarah Bernhardt, en la que se basó, entre otras, para crear el personaje de Berma, omnipresente a lo largo de la novela. 

La exposición hace también hincapié en uno de los temas más sobresalientes en la obra de Proust, el de la creación y consolidación en las últimas décadas del siglo XIX de una nueva y moderna disciplina, la Historia del Arte, en su fascinación por una ciudad como Venecia, a la que viajó dos veces, en su interés por las catedrales y la arquitectura gótica y en la no tan conocida “conexión española” del escritor, a través de las figuras de Mariano Fortuny y Madrazo y Raimundo de Madrazo, incluyendo en las salas algunos trajes y telas diseñados por el primero para mostrar un tema, el de la moda, imprescindible en el autor francés y que la muestra pretende resaltar. 

Además de pinturas de Rembrandt, Vermeer, Van Dyck, Watteau, Turner, Fantin Latour, Manet, Monet, Renoir o Whistler, entre otros, una escultura de Antoine Bourdelle y los citados diseños de Fortuny y de otros creadores de la época, la exposición incluye una selección de libros de Proust procedentes de la Bibliothèque Nationale de France y de la Biblioteca del Ateneo de Madrid, y otros préstamos del Musée du Louvre, el Musée d’Orsay y el Carnavalet - Histoire de París, la Maurithuis de La Haya, el Rijksmuseum de Ámsterdam, el Städel Museum de Fráncfort y la National Gallery of Art de Washington.



Sigmar Polke. Afinidades desveladas





Hasta el 16 de marzo de 2025 en las salas C y D del edificio Jerónimos, el Museo del Prado y la Fundación Amigos Museo del Prado, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, presentan la primera muestra individual de Sigmar Polke en Madrid. 

“Sigmar Polke. Afinidades desveladas” brinda la oportunidad de conocer la obra de uno de los artistas más influyentes del arte contemporáneo europeo, y de descubrir su fascinante diálogo con la tradición pictórica española, representada en su máxima expresión por Francisco de Goya. Dos artistas separados por casi dos siglos, pero conectados por su enfoque disruptivo y visionario. 

Esta exposición, comisariada por Gloria Moure, reúne más de cuarenta piezas del artista alemán —entre pinturas, fotografías y dibujos— junto al magnífico cuadro Las viejas o El Tiempo (1810-12) de Goya perteneciente al Museo de Lille y que se presenta por primera vez en España junto a su radiografía, una imagen que desvela composiciones que atrajeron de manera especial a Polke Este descubrimiento le animó a experimentar nuevas búsquedas artísticas y fue una fuente de inspiración para profundizar en sus propios intereses. 

El recorrido a través de la exposición une los legados de dos grandes maestros creando un diálogo entre la experimentación formal de Polke y la carga simbólica de la obra de Goya.

“Sigmar Polke. Afinidades desveladas” es la primera exposición individual de Polke que se celebra en Madrid y propone un sugerente diálogo entre la trayectoria creativa del pintor alemán y la huella indeleble que Francisco de Goya imprimió en su obra y en su pensamiento. Desde el encuentro de Polke, en 1982, con la obra del maestro aragonés Las viejas o El Tiempo (1810-12), las consecuencias configurativas se generaron con rapidez, lo que determinó que la obra de Polke se viera afectada a partir de ese momento, tanto en los motivos y las técnicas como en los criterios compositivos. En el análisis con rayos X de esta obra, Polke descubrió mucho más de lo que su intuición le había llevado a buscar. Este desvelar lo que está oculto le reafirma en su visión de la pintura como capas que sedimentan el tiempo y la memoria. 

La influencia de Goya en Polke y la complicidad que este siente hacia aquel abarca especialmente tres ámbitos: por un lado, el personaje y su circunstancia artística, política y social; por otro, la iconografía objetual y antropomórfica que aparece tanto en Las viejas como en su radiografía y, finalmente, la factura concreta del cuadro. 

La exposición no se desarrolla de un modo cronológico, sino a través de conceptos que atraviesan el tiempo, entrecruzándose con el uso de las diversas técnicas, poniendo de manifiesto la complejidad creativa de uno de los artistas fundamentales en nuestro tiempo.

Comisaria: Gloria Moure.

Sigmar Polke. Afinidades desveladas
Museo Nacional del Prado. Madrid
26/11/2024 - 16/3/2025.

sábado, 8 de marzo de 2025

Ida Vitale - Cultura del palimpsesto

Todo aquí es palimpsesto,
pasión del palimpsesto:

a la deriva,                                                                
borrar lo poco hecho,
empezar de la nada,
afirmar la deriva,
mirarse entre la nada acrecentada,
velar lo venenoso,
matar lo saludable,
escribir delirantes historias para náufragos.

Cuidado:
no se pierde sin castigo el pasado,
no se pisa en el aire.

DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER

 

Égalité des droits. Égalité des chances. Égalité de pouvoir.











El primer caso de Unamuno - Luis García Jambrina

DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER

" - Cómo usted quiera -concedió Unamuno- No obstante déjeme que le diga que no se imagina lo que se pierde, pues la mujer es, por lo general, muy superior al varón. La estupidez masculina es una cosa formidable; lo queremos todo hecho, concluido, definido, formulable. Y la mujer está siempre haciéndose, siempre por hacerse, sin concluir nunca, indefinible, informulable, inclasificable, como la propia vida, como yo pretendo que sean mi pensamiento y mi manera de ser. Fíjese si son importantes las mujeres para los hombres; deberían ser nuestro modelo, nuestro principal referente y acicate".

El primer caso de Unamuno (pág. 94) - Luis García Jambrina.

sábado, 1 de marzo de 2025

SANTA TERESA DE JESÚS

Palomares - Barcial de la Loma.
Espera, espera, que no sabes cuándo vendrá el día ni la hora.
Vela con cuidado, que todo se pasa con brevedad, 
aunque tu deseo hace lo cierto dudoso, 
y el tiempo breve largo.

 Exclamaciones del alma a Dios, 15, 3.