NICANOR PARRA
(San Fabián de Alico, Chile - 1914)
Último Brindis
Lo queramos o no
sólo tenemos tres alternativas:
el ayer, el presente y el mañana.
Y ni siquiera tres
porque como dice el filósofo
el ayer es ayer
nos pertenece sólo en el recuerdo:
a la rosa que ya se deshojó
no se le puede sacar otro pétalo.
Las cartas por jugar
son solamente dos:
el presente y el día de mañana.
Y ni siquiera dos
porque es un hecho bien establecido
que el presente no existe
que el presente no existe
sino en la medida en que se hace pasado
y ya pasó...,
como la juventud.
En resumidas cuentas
sólo nos va quedando el mañana:
yo levanto mi copa
por ese día que no llega nunca
pero que es lo único
de lo que realmente disponemos.
Canciones rusas (1967)
Otros premios:
*Nacional de Literatura (1969)
*Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo (1991)
*Medalla Gabriela Mistral (1997)
*Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2001)
6 comentarios:
Cómo me alegra que mantengas así de vivo el blog! :)
Creo que pensar que el futuro nos pertenece es, a fin de cuentas, una pretensión más del ser humano. Queremos poseer cosas, personas, lugares... Poner una etiqueta con nuestro nombre a todo lo que percibimos como potencialmente gratificante. Atesoramos cosas intangibles como las emociones; regalamos cosas volátiles como los sentimientos y el tiempo con anillos o anotaciones en una agenda. Nada, nada de esto nos pertenece.
Cierto es que técnicamente solo podemos vivir el presente, o ese espacio de tiempo que discurre entre le futur proche y le passé récent, al que llamamos presente. Este se nos echa encima para hacer planes y la única superficie sobre la que podemos trabajar para moldear la vida (y evito el posesivo) es la perspectiva de futuro, de ahí nuestra tendencia a pensar que nos pertenece (como lo hacemos con los bosques y la tierra). Esta pretensión nos está llevando a corromper todo lo que nos rodea, y me da miedo pensar que podamos hacer con la vida y el tiempo o "el futuro" lo mismo que con los bosques. "Poseemos el futuro" y por eso lo cortamos a pedacitos para ocuparlo en distintas tareas. Un claro ejemplo de ello son nuestras agendas, sobre todo las que están bien llenas. El tiempo ya no es libre, lo hemos encarcelado nosotros mismos y acabamos siendo víctimas de las cosas que queremos poseer. No poseemos la agenda sino que la agenda nos posee a nosotros.
Yo tiendo más a pensar que con lo que realmente podemos contar es con nuestras capacidades. Antes hablaba del espacio de tiempo entre el futuro inmediato y el pasado reciente...Es difícil definir qué es presente porque se convierte en pasado al nombrarlo y en un segundo nosotros hemos puesto un pie sobre el futuro, el presente y el pasado. Y seguimos haciéndolo cada segundo del día sin darnos cuenta. Esa capacidad para andar es la que "nos pertenece" y no parar pase lo que pase. ¿Qué dirían los presos de un campo de concentración, que el futuro les pertenece? Me cuesta pensarlo, lo que sí les pertenece es la capacidad de mantener viva la esperanza y seguir andando. Yo levanto mi copa por esto, "que es lo único de lo que realmente disponemos".
Y eso que en un principio no quería alargarme... jaja. Bueno, disculpa, es lo que tiene la literatura, te da de qué pensar. Espero que estés muy muy bien :) gracias por el mensajito! Yo estoy armándome ahora para los trimestrales que empezaré la semana que viene. Un bisou muy grande!!
Muy bueno, gracias. Lo he impreso para llevárselo a una compi del trabajo que estoy seguro q le vendrá bien.
SAludos. Rodrigo
Brindemos por poder inventar siempre el futuro que queramos!
un beso Covadonga,
Raquel
Muy buena Covadonga, qué verdad!
Esta la puedo entender sin que me la expliquen, no como las Coplas de Manrique!
A ver si tomamos un café un día!
Un beso! Irene M.
Irene, Jorge Manrique no se entiende del todo en una primera lectura porque es un poeta del S. XV. Lo que dice es muy acertado también y el ritmo y la cadencia de las Coplas es de lo mejor.Me alegra que te guste N.Parra.Bises.
Berta, me encanta lo que dices y sobre todo lo de las agendas.Bises.
Raquel, brindemos por el futuro que es lo que tenemos por delante sin olvidarnos del presente ni del pasado que nos ayuda a entender el segundo y a proyectarnos hacia el primero. Bises.
Rodrigo, saludos y también a tu "compa". Saludos.
¿Qué razón tiene!. La esperanza en el futuro es lo que nos ayuda a vivir, por eso la gente que no tiene futuro o lo ve muy negro no quiere vivir.
Yo brindo por el futuro y por el amor que es el motor que mueve el mundo
Un beso Covadonga,
Elena
P.D. espero que te hayan llegado mis tres comentarios, porque yo no lo tengo nada claro.
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