"EL SABER SE DEBE TANTO AL INGENIO COMO AL GUSTO."









lunes, 26 de agosto de 2013

DES GENS QUI S'EMBRASSENT



Esta  es la historia de dos hermanos de una familia de origen judío de Europa del Este que no se llevan muy bien. Las diferencias  en el modo de entender la vida de cada uno de ellos son insalvables, a pesar de que, su padre, casi senil,  hace todo lo posible por limarlas y de que las hijas de ambos se adoran, aunque han recibido una educación muy distinta, como corresponde a los padres que tienen.
¿Y quiénes son estos ‘señores’?  Pues, por un lado está Zef, creyente, practicante, austero en costumbres, violinista virtuoso, viaja constantemente por el mundo. Por el otro Roni, ateo, bon vivant, de mujer exuberante - Monica Bellucci-, amante del lujo, prefiere su yate y sus fiestas en Saint- Tropez donde puede 'agasajar' a sus invitados con su voz melodiosa y sus canciones.

Zef pierde a su mujer en Nueva York - la atropellan cuando va a buscarle algo de comer- y se presenta con la difunta en la casa de su hermano, Roni, el día de la boda de la  hija de este. Esta situación realmente dramática para Zef y muy violenta para Roni, se va a ir transformando en un escenario cómico, hilarante, extravagante, por momentos, gracias a las salidas que tienen los protagonistas delante de los enfrentamientos, los malentendidos, las  traiciones e incluso, en las reconciliaciones. No hay que perder de vista el papel que juega el joven marido, que aparecerá en escena para redondearlo todo un poco más, por si no había suficiente.

Des gens qui s’embrassent es una comedia romántica sin mucho trasfondo,  muy ligera y agradable, que está llena de clichés, pero es muy divertida, y si no que se lo pregunten a la señora que estaba detrás, que se rió a carcajadas en algunos momentos  presentados como poco menos que delirantes– las medidas de los ataúdes americanos- y disfrutó de lo lindo con esta película, que para otros, sin embargo, no merece la pena.

Des gens qui s’embrassent.
Directora: Danièle Thompson.
Reparto: Eric Elmosnino, Kad Merad, Lou de Laâge, Monica Bellucci,...
Duración 1h 40min.
Francia. 10 de abril 2013.



martes, 20 de agosto de 2013

JAVIER MARÍAS - LOS ENAMORAMIENTOS


JAVIER MARÍAS, PREMIO FORMENTOR DE LAS LETRAS 2013





                                                             AL HILO DE LA CRISIS  II

"Pero ay, al mismo tiempo  nadie renuncia a la oportunidad del todo, y ese picor nos desvela, o nos impide sumergirnos en el profundo sueño. Las cosas más improbables han sucedido, y eso todos lo intuimos, hasta los que no saben nada de historia ni de lo acontecido en el mundo anterior, ni siquiera de lo que ocurre en este, que avanza al mismo paso indeciso que ellos.
Quien no ha asistido a algo así, a veces sin reparar en ello hasta que alguien nos lo señala con el dedo y le da formulación: el más torpe del colegio ha llegado a ministro y el holgazán a banquero, el individuo más tosco y feo tiene un éxito loco con las mejores mujeres, el más simple se convierte en escritor venerado y es candidato al Premio Noble, como quizá lo sea de veras Garay Fontina, vendrá acaso el día en que lo llamarán de Estocolmo; la admiradora más pesada y vulgar logra acercarse a su ídolo y acaba casándose con él, el periodista corrupto y ladrón pasa por moralista y por paladín de la honradez, reina el más remoto y pusilánime de los sucesores al trono, el último de la lista y el más catastrófico; la mujer más cargante, engreída y despreciativa es adorada por las clases populares a las que aplasta y humilla desde un sillón de dirigente y que deberían odiarla, y el mayor imbécil o el mayor sinvergüenza son votados en masa por una población hipnotizada por la vileza o dispuesta a engañarse o quizá a suicidarse; el asesino político, en cuanto cambian las tornas, es liberado y aclamado como patriota heroico por la multitud que hasta entonces había disimulado su propia condición criminal, y el patán más clamoroso es nombrado embajador o Presidente de la República, o hecho príncipe consorte  si por medio anda el amor, el casi siempre idiota y desatinado amor.
Todos aguardan la oportunidad o se la buscan, a veces depende sólo de cuánta voluntad se ponga en la consecución de cada anhelo, cuánto afán y paciencia en la de cada propósito, por megalómano y descabellado que sea" . [...]



Javier Marías, Los enamoramientos, (página 186)






JAVIER MARÍAS, PREMIO FORMENTOR DE LAS LETRAS 2013






jueves, 15 de agosto de 2013

CAMILLE PISSARRO


Aunque Pissarro fue uno de los pintores fundacionales del movimiento impresionista, ha quedado caracterizado y por tanto relejado a ser el pintor  por excelencia de paisajes. Esta exposición  así lo confirma porque muchos de los 70 cuadros que la componen – salvo algún retrato de su familia- son paisajes de los pueblos  y ciudades donde Pissarro vivió. En la mayoría de estas telas, representa paisajes rurales con gentes que hacen un descanso de sus labores de campo o que charlan  con sus vecinos o que contemplan los elementos de la campiña que las rodean en algún camino, senda que parece como que invitara al espectador a adentrarse en el cuadro y recorrerlo también, amparado por árboles centenarios cuyos erguidos troncos verticales contrastan con la horizontalidad de  la vía  o de los muros.
En otras ocasiones, Pissarro representa casas de campo incrustadas en el paisaje o huertos de frondosas verduras y hortalizas, símbolos del trabajo laborioso de las gentes  del campo.
Junto a todos estos elementos propios de los paisajes de la campiña francesa, llama la atención, que en algunos de estos cuadros, incluya, con una naturalidad a penas disonante, otros que nada tienen que ver con aquellos, como son las nuevas fábricas de altas chimeneas, cuyo humo se mezcla con las blancas nubes del cielo. Esta simbiosis de componentes persigue  simplemente la belleza gracias a las pincelas cortas y de vivos colores, más que la narración de alguna historia.

Pissarro,  tras una breve inclusión en el Puntillismo, va a sumarse a la moda– como su amigo Monet hiciera con la fachada de la catedral de Rouen-  de hacer series de un mismo paisaje;  en este caso son de las calles y bulevares de París cuando, por razones de  salud, tuvo que regresar a la capital  y como no podía salir a pintar al aire libre, pintaba  lo que veía desde lo alto de su ventana.

Los cuadros que cierran esta interesante muestra sobre Camille Pissaro, Padre del Impresionismo, también son de paisajes, pero bien distintos a los anteriores, porque las estampas que recoge representan, sobre todo, la actividad propia de  los de los puertos de la costa de Normandía.



http://www.museothyssen.org/microsites/exposiciones/2013/pissarro/index.html

domingo, 11 de agosto de 2013

ÉRIC REINHARDT - Le système Victoria



Esta novela me la recomendaron, y después de mucho insistir, me la he leído.  Me ha costado un poquito más de lo habitual terminármela, no  leía muchas páginas seguidas, encontraba la prosa densa y eso que la trama estaba muy clara desde el principio e incluso el final, porque a poco de empezar ya sabemos que será trágico, lo que hace pensar que la novela contenga una carga de crítica moral contra ciertos comportamientos actuales donde las pasiones desenfrenadas  no conducen más que al desastre. Sin embargo, ni el tratamiento ni las consecuencias de las pasiones que en la novela se cuentan son novedosos en literatura, por mencionar alguno, citaré La Celestina que tiene también ese corte  edificante como tantos otros libros.

La historia comienza cuando  David Kolski, casado y con dos hijas, director de travaux de la Uranus, la mayor torre que se está construyendo en el barrio financiero de París, La Défense; queda fascinado, en un centro comercial, por Victoria de Winter, casada, directora de Recursos Humanos de una  importante compañía internacional de Londres, viajera infatigable, prototipo de une femme d'affaires

A David, le gustan mucho las mujeres y no desperdicia la ocasión de abordar a Victoria, aunque le cuesta tres horas de ‘persecución’ y el perderse el cumpleaños de su hija pequeña. De esta manera fortuita comienzan una relación  muy pasional, de escenas muy tórridas en las habitaciones de lujosos hoteles, que reserva Victoria.

Toda la historia la cuenta David, - a lo El gran Gatsby -,  once meses después de haber conocido a Victoria, y no lo hace de forma lineal, sino que va intercalando saltos atrás – su juventud, los problemas de salud de su mujer, las dificultades que les ponías sus suegros-; con saltos adelante: en varias ocasiones habla del final aciago de esta relación y de su vida. 
A medida que la relación avanza, no solo relata sus encuentros amorosos sino que también se ponen de manifiesto las diferencias que había entre los dos amantes, tanto a nivel amatorio - él no repite nunca, ella suele tener relaciones largas-, como a nivel social  - ella liberal, él de ‘izquierdas’- y desde luego, económico – ella 350 000€, él un buen sueldo, pero no le llega ni por asomo-. Todos estos elementos juntos provocan en David, una especie de fascinación por aquello que no podrá conseguir nunca y que Victoria representa, pero al mismo tiempo un rechazo por momentos vehemente.
A la vez que vive esta relación, empiezan a surgir serios problemas con la torre, pero siente que, gracias a la relación que mantiene con Victoria tiene una fuerza interior desconocida para él  hasta el momento y que todo lo podrá solventar.

Historia con la que podrán disfrutar a aquellos que les gustan las novelas thriller, con un poco de todo, especialmente sexo. Esto va a temporadas.




El sistema Victoria.
Éric Reinhardt.
Alfaguara 2012. 423 pág.


Le système Victoria.
Éditions Stock 2011.


martes, 6 de agosto de 2013

ALAN BENNETT

Alan Bennett es alguien muy conocido en El Reino Unido por sus obras de teatro, por sus guiones cinematográficos, por sus escritos,  etc, a pesar de ello, todavía no había tenido la ocasión de leer nada de él. Ahora he leído, prácticamente seguidas, estas dos novelas, por así decirlo, porque una de ellas la componen dos relatos cortos.
Las historias que relatan  son bien distintas  y  sin embargo, las tres tienen como protagonistas a mujeres respetables de una cierta edad y va a ser, en este momento de sus vidas, cuando se descubren en situaciones que para ellas hubieran sido del todo impensables y casi, casi, rayanas en el libertinaje, en sus años anteriores. Hay que mencionar además, que serán chicos jóvenes quienes las trasladan a semejantes escenarios.

Dos historias nada decentes, está formada por dos historias como el título lo dice. La primera, La señora Donaldson rejuvenece, la protagonista, Mrs Donaldson, que acaba de enviudar, trabaja en un hospital como ‘simuladora’ y para llegar a fin de mes, alquila una de las habitaciones de su casa a una pareja de jóvenes estudiantes. Estos  que tienen problemas para pagarle, le proponen una forma  muy imaginativa de abonar su alquiler, mientras ella se toma una taza de té y así, de esta manera tan singular, la van a convertir en una voyeuse.
La segunda es La ignorancia de la Señora Forbes. Tanto el título como el principio del relato despistan un poco, ya que  Mrs Forbes, aparece como una madre muy protectora con su hijo y, como no podía ser de otra manera, no está de acuerdo con la chica que su hijo ha elegido para ser su mujer;  la  considera poco menos que pusilánime. Pero, la Señora Forbes, sabe mucho más sobre su familia de lo que finge saber, pero es que además, es que es mujer de corazón caliente. Luego aparece su marido, su hijo, la novia  y algún personaje más que aderezan les ménages ¡Lo que llegan a esconder  les liasons familiares!

En Una lectora nada común, hay una regia protagonista, que se convierte en una pertinaz lectora, gracias a un auxiliar de cocina de Palacio. Este encuentro fortuito y sus consecuencias, provoca una serie de cambios en la manera de ser y de obrar de Su Majestad; cambios que sorprenden, de tal modo, a los que la rodean, que harán todo lo que está en su mano para que Su Majestad, deje tan nocivo hábito. Todo ello, decorado con una interesante lista de lecturas y autores.

Alan Bennett, con un estilo ligero y momentos delirantes, absurdos incluso, consigue tratar temas de mayor calado, aunque deja un poco con la miel en los labios porque no llegar del todo al fondo.
Dos nouvelles, agradables y ágiles de leer.



Una lectora nada común.
Bennett, Alan.
Colección Panorama de Narrativas. 2008.
Pág. 128.

http://www.anagrama-ed.es/titulo/PN_694




Dos historias nada decentes.
Bennett, Alan.
Colección Panorama de Narrativas. 2013.
 Pág. 160.

http://www.anagrama-ed.es/titulo/PN_826

sábado, 3 de agosto de 2013

RAYUELA 50 ANIVERSARIO



Edición conmemorativa




 ‘Rayuela, el París de Cortázar’ y el diccionario.



Por cortesía del Instituto Cervantes de París, El País ofrece el pdf del catálogo de la exposición que la institución ha dedicado al autor argentino.




jueves, 1 de agosto de 2013

CRÍTICA DE LA CRÍTICA


"Merece algo más que aplauso quien hace apetecibles las obras valiosas".

[...] "En lo que respecta al crítico (un intermediario a fin de cuentas), incurrirá en graves deficiencias si da en creer que su paladar constituye el único criterio admisible. No es raro toparse con personas que identifican lo que no les gusta o les despierta alguna suerte de antipatía con lo que está mal hecho. La historia universal de la literatura abunda en casos de juicios adversos sobre obras que el tiempo elevó a la categoría de maestras.

Merece algo más que aplauso, merece agradecimiento el crítico que hace apetecibles las obras valiosas; aquel que no se limita a descifrarlas con adusta terminología de profesor, sino que se toma la molestia de transmitir entusiasmo, humanizando generosamente sus textos críticos por la vía de exponer una parte de su condición de lector sensible; aquel, pues, que explica con precisión y claridad las razones por las que considera que una obra determinada repercute positivamente en él. Nada de lo cual es compatible con eslóganes del tipo: “lean sin falta la novela, no se la pierdan” y demás clichés del redactor de reseñas metido a mercader. Ni con la dejación intelectual de quien, para ponderar la calidad de un autor, menosprecia a otros. Ni con el lanzamiento de cohetes artificiales del tipo: “el mejor de su generación, el más grande de su época” y demás hipérboles de improbable demostración que, además, contribuyen a difundir y fijar los tópicos". 

Fernando Aramburu, "Crítica de la crítica", El País.