(Zelazowa Wola 1810- París 1849 )
Tuve la oportunidad de asistir al Concierto para piano y orquesta en fa menor - en versión para piano y cuarteto de cuerda- de Chopin que ofrecieron el prestigioso pianista, Janusz Olejniczak y The Silesian String Quartet.
Durante el concierto, la atmósfera se fue impregnando, nota a nota, de la emotividad de la música, reflejo del amor y de la entrega del compositor por el piano, de su adoración por el arte y la belleza plástica propias de un hombre de exquisita formación al igual que de su temperamento exacerbado y pasional propias del hombre del Romanticismo.
Al acabar el concierto, el público, completamente entregado, dedicó al artista una larga e intensa ovación, quien correspondió a los aplausos con un largo bis. Se repitieron la intensidad y la duración de los aplausos, el músico volvió al escenario e interpretó un nuevo movimiento en agradecimiento a los aplausos del ávido auditorio.