MIRCEA CARTARESCU - Nostalgia

NOSTALGIA

Este libro me ha llegado con las mejores recomendaciones de mi compañero Àlex. Siempre que lee algo que le sorprende, me pasa el libro a ver qué me parece. Hasta ahora todo lo que me había dejado me había parecido estupendo – Sebald, por ejemplo-, en el caso de Nostalgia, me ha pasado lo mismo aunque me haya dejado un regusto desigual. Cartarescu, es un  escritor original, distinto y , tal vez por ello, su obra, tanto prosa como  poesía, haya recibido grandes elogios por parte de la crítica internacional. La admiración que su manera de narrar ha despertado, es casi unánime, de tal forma que le consideran un muy firme candidato para el próximo Nobel de Literatura.

Nostalgia,-que para propio autor es una novela, aunque más bien podría pensar en un libro de relatos cortos-, está divido en tres partes: la primera, Prólogo, incluye el relato de El Ruletista,- tal vez su texto más famoso-; luego viene Nostalgia que se compone de tres relatos más: El Mendébil, Los gemelos y REM y la última Epílogo con El arquitecto.

Las historias que cuenta son buenos ejemplos de lo que se ha dado en llamar el onirismo de la literatura rumana que es un intento por utilizar el sueño no solo como “un simple proveedor de imágenes sino todo un modelo compositivo”. El propio Cartarescu dice que “el sueño no es una huida de la realidad, es parte de la realidad trenzada de forma inseparable con todo lo demás”.*

Así, estos relatos de Cartarescu recuerdan sin mucho esfuerzo a Borges, Cortázar, Kafka,  García Márquez, o al propio Cervantes, autores que conoce bien y  hacia los que siente admiración; pero lo que le diferencia  de estos, no es su espacio onírico, sino que su prosa es mucho más recargada y polifónica, un chorro incansable de percepciones sensoriales, de descripciones tan minuciosas, que conducen al lector a un bucle de dimensiones inesperadas y  que, en ocasiones, te lleva a  preguntarte si todas estas líneas son necesarias o con la mitad – como hacia Borges- habría sabido conseguir el mismo efecto; pero, por lo demás, todo es curioso, singular, peculiar. 

Me ha parecido admirable el cambio de puntos de vista, de hacernos creer que es un personaje el que cuenta la historia o del que se está hablando y luego resulta que es otro o el mismo a la vez; quizás, sea por eso, que de vez en cuando, el narrador interpela al lector directamente, dialogo que se agradece para no perderse en ruta, porque siempre sorprende. En cuando a sus personajes, a veces, recuerdan a los de los relatos naturalistas, tipos desgranados, de una humanidad poco convencional, tipos de perfiles aparentemente sencillos, pero que llevan detrás un inusual análisis plástico que poco a poco va perfilando  su personalidad individual, amalgana de caracteres esencialemente humanos. También está muy bien la recreación de los momentos de la infancia donde la percepción del universo es diferente.

Nostalgia un libro muy recomendable para aquellos que quieran dejarse sorprender y  leer algo poco habitual.

* Notas tomadas de la introducción de Edmundo Paz Soldán.

Nostalgia
Mircea Cartarescu.
Impedimenta. 384 pág.
Octubre 2012.

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