"EL SABER SE DEBE TANTO AL INGENIO COMO AL GUSTO."









jueves, 31 de julio de 2014

DES MOTS... UNE HISTOIRE


El mes de julio termina y Le coin  des archives ha cubierto una nueva temporada, que como cada una de las anteriores, también ha tenido sus singularidades.
De ésta, creo que  me queda el sentimiento de que no he dado abasto para colocar todo lo que me hubiera gustado poner,  de que no me ha dado de sí el tiempo, como si se hubiera encogido, por lo que tengo pendiente, dos películas, dos obras de teatro y reseñas de libros. Y si por un lado, sí que es cierto que  hay muchas más películas, por otro, me ha dado la impresión de que 'he escrito' menos.Tal vez, sea demasiado y por eso, he tardado más en escribir los posts, por lo que, cuando he colgado alguno de un libro o de alguna pelí, estos ya no estaban en el candelero. A veces, me ha dado lástima, pero en realidad, eso no importa demasiado porque Le coin es para mí, eso, des archives
Tengo de nuevo que dar las gracias a todas las amigas y los amigos que se pasan para saludarme y dejar un comentario; también a los más discretos que no escriben nada, pero que leen y luego me comentan, e incluso tengo los que leen y no me comentan a mí, pero sí a otros y a través de esos otros me llegan a mí sus opiniones. El comentario más entrañable que me han hecho este año fuera del espacio de Le coin  fue el de una amiga que me dijo  que le hubiera gustado que le hubiera dedicado un escrito en mi blog; según ella, no tuve en cuenta sus circunstancias personales como a ella le hubiera gustado que quedaran reflejadas en Le coin des archives, le dediqué una poesía.  
Este comentario y otros me convencen de que si por algo merece la pena seguir con el blog, es porque Le coin pone en relación a mucha gente y a mí con ella; esta temporada de  Le coin, ha sido especialmente una temporada de, para, sobre, las personas que me han rodeado y sobre tesituras en las que me ido poniendo la vida. 
De todos modos, esta temporada será una temporada que recordaré, creo que siempre, y que marcará las que vengan. La variación  me ha dejado de medio lado.


jueves, 24 de julio de 2014

ENTRE EL CIELO Y LA TIERRA



 "Entre el cielo y la tierra. 
Doce miradas al Greco cuatrocientos años después"

Una exposición que explora el lugar en el que se sitúa la influencia del Greco en el arte de hoy, a través del trabajo que desarrollan doce artistas actuales que atestigua su vigencia en la creación contemporánea.
José Manuel Broto, Jorge Galindo, Pierre Gonnord, Luis Gordillo, Secundino Hernández, Cristina Iglesias, Carlos León, Din Matamoro, Marina Núñez, Pablo Reinoso, Montserrat Soto y Darío Villalba son los creadores que están Entre el cielo y la tierra, a los que se suma la colaboración de Joan Fontcuberta.
Los artistas plantean abiertamente su vínculo con el cretense, un reconocimiento que, a veces, es explícito en sus trayectorias y, otras, aunque menos evidente, igualmente intenso.





Del 30 de abril al 3 de agosto de 2014.
Museo Nacional de Escultura.
Palacio de Villena
Calle Cadenas de San Gregorio
47011 Valladolid
De martes a sábado de 11 h a 14 h y de 16:30h a 19:30 h.
Domingo de 11 h a 14 h
Cerrado todos los lunes
ENTRADA GRATUITA A LA EXPOSICIÓN


http://www.diputaciondevalladolid.es/arte_valladolid/imprimir/?idboletin=2498&idarticulo=148567&imp=1

http://www.elgreco2014.com/#!entre-el-cielo-y-la-tierra/c15fb

domingo, 13 de julio de 2014

'TIEMPO DE VERANO'

"Julio caliente, quema al más valiente"

Estamos a 13 de julio, y es el primer día de casi verano. Hoy, sí que ha hecho calor, aunque no  ese calor que te aplana la cabeza propio del mes de julio.
Durante estos días, nadie creía que estuviéramos en verano. Hacía frío, especialmente por las mañanas y luego por las tardes, siempre un viento más que fresco. Pero a esto, estamos más o menos acostumbrados por aquí, sobre todo, a finales de agosto porque ya se sabe: “Agosto, frío al rostro”  y que no se te olvide la chaqueta que no estorba; pero en julio…, nadie se podía imaginar semejante frío, aunque las gentes ya no dan mayor importancia al tiempo cargan el jersey y ya está resuelto..., lo único por los niños que no pueden disfrutar de la piscina.
El día más singular de este particular no-verano, fue el día 4 de julio. La víspera, el Señor del tiempo de la Tele anunció que, por fin, al día siguiente, subían las temperaturas después de  estos días de fuertes tormentas y granizos. Yo me lo creí, hasta que, por la mañana, levanté la persiana y me despabiló lo que veía: una niebla, de un sorprendente espesor, se había engullido todo el paisaje. Las casas de enfrente y la torre de Santa María habían desaparecido del horizonte. Era como una alborada de noviembre de suelos mojados y tejados rociados.
Hasta bien entrada la mañana, la gasa grisácea, que había difuminado todas las siluetas situadas a más de 10 metros, no comenzó a desperezarse y poco a poco, el sol empezó a brillar. La tarde fue, como dice el dicho, “de paseo”, pero fresco y como llevamos ropas más ligeras, el frío se hace notar fuera y también dentro de las casas, en las camas, la manta no sobraba, incluso resultaba agradable.
El fin de semana resultó desigual. El domingo, al atardecer, se despidió con una tromba de agua de una fuerza tal, que se llevó por delante todo lo que pilló que, apareció luego en los remansos. ¡Qué pena ver, en el patio, los largos tallos de los malvarriales llenos de flores  partidos en dos, las rosas sin pétalos, los lirios tumbados por la fuerza del aguacero! En las huertas, fue peor.
Y a pesar de lo anunciado, siguió el fresco matinal, por ser amable, porque hubo ocho grados, durante todos estos días.
Sin embargo, las hojas de todos los arbustos, madreselvas, setos y árboles del jardín que hay frente a mi casa lucían un esmeralda charolado, brillante, que daba gusto verlas, por no decir también, que el aire pesa poco, que huele más limpio.

miércoles, 9 de julio de 2014

GIBRÁN JALIL GIBRÁN

La zorra 

Una zorra miró su sombra al amanecer y se dijo:
-Hoy me comeré un  camello. 

Y pasó toda la mañana buscando camellos. Pero al mediodía volvió a mirar su sombra y se dijo: 
-Bueno..., creo que me conformaré con un ratón.


lunes, 7 de julio de 2014

VÁCLAV HAVEL


"La esperanza no es la convicción de que las cosas saldrán bien, sino la certidumbre de que algo tiene sentido, sin importar su resultado final."






martes, 1 de julio de 2014

MARCAPÁGINAS - III


Aunque nadie lo diría, el verano ya está aquí y con él  nuevos libros que elegir para pasar, lo más entretenido posible, los ratos  de piscina en los que no tengo a nadie a mi alrededor, los desplazamientos de largo recorrido o la espera de media tarde de  final de partida bajo la acacia.
Ya he elegido la primera novela, es la que tenía pensado leer en Pascua, pero cambié de opinión, me apetecía algo más corto, pensando que  así, tendría tiempo para hacer la reseña de las que había leído de Navidad, pero no. Los dos  libros de Navidad se quedaron sin su reseña, seguramente porque ninguno de los dos colmó mis expectativas que, sin lugar a dudas, habían hecho  acrecentar  los medios de comunicación y la calidad de los escritores que los firmaban: dos premios Nobel. Ahora  que ya ha pasado tanto tiempo  y  como todo el mundo ha hablado ya de ellos,  no merece la pena hacer una reseña, sólo recogeré las impresiones que me dejaron.
Del primero de ellos, El héroe discreto de Mario Vargas Llosa, cuya trama me pareció discreta, me quedó claro que lo que yo entiendo por un hombre corriente y lo que entiende Vargas Llosa o la crítica no es lo mismo. Sin embargo, leer la prosa de Vargas Llosa es siempre una elección de estilo, de equilibrio en longitud de frase, de puntuación…
La segunda obra, Mi vida querida  de Alice Munro, es un libro de relatos cortos donde se narra el día a día de gente corriente,  pero narrado de tal forma que, en algunos momentos, tuve la impresión de que los acontecimientos que  en ellos se refieren, sean titulares de teletipos. Esta manera de narrar fue toda una sorpresa para mí; sin embargo,  eché a faltar un héroe de esos  de ‘ficción’. Además, se juntó que su lectura me resultó incómoda; creo que nunca he leído una traducción  de una casa editorial de prestigio, con este tipo de errores: catalanismos de diferentes tipos e incluso había un cambio del sentido de una frase; espero que la editorial Lumen  lo revise.

Y aunque quedan todavía pendientes las reseñas de los libros  que leí en  abril; de manera general, puedo decir que,  esta temporada de lecturas que termina ha estado marcada por el regusto de la lectura de los clásicos  - Les trois comptes de Flaubert, L’homme qui rit de Victor Hugo  y varios  cuentos de Maupassant y  Stefan Zweig, éste último me resultó un poco empalagoso, al final -, en un  invierno  que se me ha pasado muy deprisa, demasiado deprisa  y en una primavera sombría, triste.
La temporada la completan varios escritores francófonos actuales de calidad y reconocimiento de la crítica desigual: Patrick Mondiano, Sylvie Testud, Christian Gailly, Eric Holder,  Chantal Thomas y Valérie Zenatti. Y otro más,  Boris Vian , que ya es un clásico,  con su  L ‘écume des jours, que he vuelto a leer.

A éstos, habría que sumar la siguiente  lista que incluye autores de diferentes nacionalidades: James Thurber- sobre el que tengo una anécdota-, Joseph Roth, Arthur Schnitzler, E. A. Poe, H. G. Wells, W.W. Jacobs, H.H. Ewers, M.R. James, A. Machen y de temáticas diversas.

Y después de esta breve mirada a estos meses de lecturas ya caminados, solo  me queda desearos unas  acertadas  lecturas estivales.

DE BONNES LECTURES

BEL ÉTÉ