HOMENAJE A SAN JUAN DE LA CRUZ
(Vía purgativa, iluminativa y unitiva)
Sólo quien se entrega recibe.
Huele, quien renuncia al olfato,
un olor prodigioso. ¡Vive,
misterïoso desacato!Y así de pronto asciende ya
de las rosas de primavera
fragancias de lo que será
en la cima de lo que era.
Y el alma, desde ese momento,
puede, en la variedad del mundo,
escuchar la canción del viento
y contemplar el mar profundo.
Carlos Bousoño, Metáfora del desafuero (1988). VI - EL ANHELO
No hay comentarios:
Publicar un comentario